Roy E. Howard, Ph.D.
Gallup Graduate Studies Center, Western New Mexico University
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Un Informe Breve de la Crítica Literaria: LA AMBIGUEDAD EN EL QUIJOTE
Manuel Durán; Xalapa: Universidad Veracruzana, 1960


Roy E. Howard
9 febrero 1993

El lingüista norteamericano, Victor Raskin, define la ambigüedad así: una palabra o frase que se puede entender de dos sentidos ("Jokes", Psychology Today, p. 36). Raskin explica que el humor resulta cuando el lector entiende de repente sentidos opuestos de ambigüedad o contradicción. Durán propone que Cervantes usa la ambigüedad para crear el humor en la novela, Don Quijote. La base de la oposición de sentidos consiste en parte de la diferencia entre las tradiciones y valores del siglo XIII y la vida contemporánea del período renacentista.
Parece todo un esfuerzo de Cervantes de destruir o poner en duda los mitos del pasado; y lo hace con los actos de mayor sinceridad de Quijote, por hacerlos simpáticos o hasta ridículos. Así, el lector simpatiza con el hombre que tiene un plan de vida, aunque es el carácter menos capaz de comprender la realidad, un valor alto del período del Renacimiento. Por eso resulta una ambigüedad para el lector contemporáneo entre la tradición cultural, la filosofía moderna y las realidades del mundo actual.
Un tema sobresaliente es el contraste entre el "hombre interior" y el 'hombre exterior". Constantemente Quijote intenta poner en práctica los ideales antiguos pero nunca alcanza la dominación de su deseo por causa de la flaqueza de su realidad física, externa. El efecto se facilita porque el héroe no solo sueña y escribe, pero hace todo lo posible por lograr sus sueños imposibles. En contraste, a los "sanos de mente" les falta sueño y empeño para salir de la rutina de la vida. ¿Son sus actos simplemente graciosos, o una crítica de la falta de valor de otros?
Otra ambigüedad consiste en la transición entre la actitud moralizadora y la actitud que llamaremos "libre" o "suelta" (p. 21). Don Quijote parece a la mente humanista como sobredramático y demasiado moralizador. En contraste tenemos a Sancho Panza que actúa como la gente común del día con respeto a la moralidad; mas él no es héroe con convicción e integridad como su amo, quien, se supone no tiene sentido; pero en el sentido de la moralidad, el loco puede ser mas moral que los contemporáneos lectores.
"El humor vuelve ambiguo lo que toca: es un implícito juicio sobre la realidad y sus valores, una suerte de suspensión provisional, que los hace oscilar entre el ser y el no ser... Hasta el mismo Sancho duda y no sabe ya si Aldonza es Dulcinea o la labradora que conoce, si Clavileño es un corcel o un pedazo de madera. La realidad castellana es la que ahora vacila y parece inexistente" (p. 95).
Con doble sentido y contrastes entre la realidad y el sueño, Cervantes utiliza el humor para llevar a la mente renacentista una consideración de sus propios actos y valores.


Roy E. Howard, Ph.D.
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